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lunes, 16 de noviembre de 2009

Rusia todavía no está en el Mundial

rusia

A pesar de la victoria, Rusia para nada tiene la repesca en el bolsillo, ya que a pesar de ser superior a Eslovenia, y demostrarlo en el partido del sábado, un gol en los últimos minutos del esloveno Pecnik deja las cosas en el aire. Los de Hiddink saben que no se deben confiar si quieren que su apuesta por la Copa del Mundo se haga de una vez efectiva. Diniyar Bilyaletdinov, jugador del Everton inglés, fue la estrella del partido con dos goles, los cuales llegaron al final de la primera parte y al principio de la segunda, cuando se creía que la repesca estaba decidida.

La capital rusa fue el escenario para un partido en el que el Estadio Luzhniki se llenó para apoyar a los suyos, sabiendo que de este partido dependía y mucho el dejar la repesca sentenciada. Los rusos eran superiores, pero los eslovenos de Matjaz Kek dieron algún que otro susto al principio del partido. El mejor por parte del bando visitante fue el guardameta Samir Handanovic, arquero del Udinese italiano que probablemente sea el mejor jugador de los eslovenos.

Hubo que esperar hasta los últimos minutos de la primera mitad para ver el gol de Bilyaletdinov, centrocampista zurdo del Everton que sorprendió con un golazo con la pierna derecha. Tras el descanso continuó el dominio ruso y los de Hiddink lo intentaron desde el minuto 45. Tuvo que ser de nuevo el jugador del Everton el que encontrará el gol, el cual significa su cuarto con la elástica rusa.

Roman Pavlyuchenco y Andrei Arshavin lo intentaron durante todo el encuentro, pero el meta esloveno estuvo muy fino para evitar que la cosa pasara a mayores. En los últimos minutos Eslovenia consiguió un gol que les mete parcialmente en la repesca. Nejc Pecnik, jugador que saltó al terreno de juego 10 minutos antes del final, marcó el gol a dos del final, algo que dejó con mal sabor de boca a los aficionados rusos.

martes, 3 de noviembre de 2009

El Atlético intentará resucitar frente al líder de la Premier

atletico Quique Sánchez Flores llegó al Atlético de Madrid cuando el equipo estaba pasando por su peor momento. Posiblemente uno de los comienzos ligueros más desastrosos en el Manzanares hace que todo resultado positivo sea visto como ganar una final. Por ello, la victoria de hoy sobre el Chelsea sería un paso de gigante en la apuesta del Atlético esta temporada, en la cual solo han conseguido dos victorias y una de ellas frente al Marbella en Copa del Rey.

El Chelsea por su parte está viendo las cosas de manera opuesta. Casi todo son victorias, y más si hablamos de competición europea, donde ha ganado todos los partidos. Sacar la máxima puntuación del Vicente Calderón les aseguraría estar en octavos de final de una competición que les dejó con muy mal sabor de boca el año pasado tras lo ocurrido en Stamford Bridge frente al Barcelona.

Los Blues cuentan hoy con un factor muy positivo, la vuelta de Drogba a la Champions League tras haber estado sancionado tres partidos por su ida de pelota frente a los culés. El de Costa de Marfil ha sido uno de los hombres clave en competición liguera esta temporada, formando una pareja muy sólida con Nikolas Anelka. Además el Chelsea llega a la cita tras haber conseguido 13 goles en sus últimos tres partidos, manteniendo la portería a cero.

Estos números no son un alivio para el Atlético de Madrid, el cual tendrá que sacar todo el coraje para conseguir algo positivo en Champions de una vez por todas. Tan solo suman un punto en el Grupo D, lo que les colca colistas, y una derrota les apearía antes de tiempo de su sueño europeo. Además, el fin de semana que viene reciben al Real Madrid, por lo que los de Sánchez Flores podrían estar pensando más en el derbi que en la cita europea, algo que no les haría ningún bien, ya que el Chelsea no es un rival a pasar por alto.

Todos sabemos que el Atlético siempre ha sido capaz de perder lo más fácil y dar la sorpresa en lo más difícil, por ello desde Londres no hay confianza alguna. Están en puestos de descenso en la liga española, pero sus ganas de volver a retomar el rumbo de la pasada campaña podría sorprender a más de uno esta noche.

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